
– Yo tengo una vaca.
– La vaca es blanca y negra.
– Yo bebo leche.
– Tú bebes leche.
– La leche viene de la vaca.
– La vaca no bebe vino.
– Las vacas comen hierba.
– Mi vaca.
– Nuestra vaca.
– ¿La vaca no bebe vino?
– ¿Por qué la vaca no bebe vino?
– El granjero tiene vacas.
– Las vacas viven en la granja.
– El granjero duerme.
– Yo voy a la granja.
– Yo doy vino a las vacas.
– Las vacas sí beben vino.
– Las vacas están borrachas.
– Yo vuelvo a la granja.
– Yo vuelvo cada noche.
– Mi mujer pregunta dónde voy.
– ¿Las vacas beben vino?
– Es un experimento científico.
– Mi mujer se va de casa.
– Yo leo el periódico.
– El periódico habla de un hombre.
– El hombre da vino a las vacas.
– La policía busca al hombre.
– ¿Quién es el hombre?
– El hombre soy yo.
– No se lo digo a nadie.
– Hace dos semanas que el hombre no va a la granja.
– El hombre es precavido.
– El hombre soy yo.
– ¿Las vacas beben vino?
– Las vacas no beben vino ahora.
– La policía pregunta.
– Yo no doy vino a las vacas.
– Yo no soy el hombre.
– La policía me cree.
– Yo vuelvo a la granja.
– La granja es grande.
– La granja es más grande que el apartamento.
– El hombre da vino a las vacas.
– Yo soy el hombre.
– Yo también bebo vino.
– Las vacas son mis amigas.
– La vaca empuja al hombre.
– El hombre está disgustado con la vaca.
– La vaca y el hombre discuten.
– La vaca y el hombre se pelean.
– La vaca es más fuerte que el hombre.
– Yo soy el hombre.
– El granjero despierta.
– El granjero nos ve a la vaca y a mí.
– La vaca y yo nos disculpamos.
– El granjero llama a la policía.
– La policía nos arresta a la vaca y a mí.
– El juez juzga.
– El juez está enfadado.
– El juez no bebe vino.
– El juez nos condena a la vaca y a mí.
– La cárcel es más grande que la granja.
– La vaca y yo compartimos habitación.
– La habitación es pequeña.
– La comida de la cárcel no nos gusta.
– En la cárcel no hay vino.
– Nosotros bebemos café.
– La vaca y yo nos tatuamos cada uno el nombre del otro.
– Los guardias de la cárcel son amables.
– Yo aprendo italiano en la cárcel.
– ¿Hablas italiano?
– Yo hablo un poco de italiano.
– La vaca no aprende italiano.
– La vaca está triste.
– La vaca compra heroína.
– La vaca es adicta a la heroína.
– La vaca muere de sobredosis.
– ¿He matado a la vaca?
– He matado a la vaca, en cierto modo.
– Cumplo mi condena.
– El hombre sabe italiano.
– El hombre estudia para el examen.
– El hombre aprueba el examen.
– Yo soy el hombre.
– Yo salgo de la cárcel.
– La cárcel está lejos.
– Yo vuelvo a casa.
– Yo busco un trabajo.
– Yo tengo un trabajo.
– Yo escribo frases para un curso de italiano.
– Los estudiantes aprenden italiano.
– Los estudiantes se quejan.
– A los estudiantes no les gustan las vacas.
– El hombre echa de menos a la vaca.
– El hombre se siente culpable.
– Yo soy el hombre.
– La historia es real.
– Es mi historia.
– Escribo mi historia en italiano.
– El jefe pide frases diferentes.
– Las frases nuevas son diferentes.
– Yo cambio la vaca por el pato.
– El pato es marrón.
– El pato no bebe vino.
– Yo voy al estanque.
– Yo le doy vino al pato.
– El jefe se da cuenta.
– ¡El pato es una vaca!
– ¡El pato no es una vaca!
– ¡Sí, el pato es una vaca!
– El jefe despide al hombre.
– El hombre no tiene trabajo.
– El hombre echa de menos a la vaca.
– Yo soy el hombre.